lunes, 16 de noviembre de 2009

La aventura de ser maestro


Me gustó mucho el escrito de José M. Esteve ya que me hizo recordar muchas cosas de cuando inicié dando clase, al principio había nervios aún cuando en mi caso tenía los conocimientos teóricos, didácticos, algunas estrategias, etc., pero como se menciona en el escrito era alumna y ahora tenía que centrarme como docente, se supone que las prácticas nos ayudan pero no es lo mismo estar de practicante que ser la titular del grupo y ser la "autoridad" en el aula. Efectivamente aprendemos a ser docentes por ensayo y error, a mi también me daba pavor, al principio, de que el alumno me hiciera alguna pregunta cuya respuesta ignoraba o llamarle la atención a un alumno y ponerle algún castigo porque todo el grupo está pendiente de qué vas a hacer, te está "midiendo" y en algunas veces eso marca la forma en la cual el alumno se va a comportar en clase.
Afortunadamente con el paso del tiempo vas adquiriendo confianza, vas aprendiendo con cada grupo, cada semestre y vas tomando lo positivo para no cometer los mismos errores en el siguiente curso, a mi en lo personal, me gusta hacer al final de semestre una pequeña evaluación con una actividad llamada semáforo en el cual les pido a los alumnos que en una hoja dibujen un semáforo y escriban en el rojo lo que no les gustó de la materia, en el amarillo sugerencias para mejorar y en el verde lo que si les gustó. Esto me permite tener una idea de como me ve el grupo.
Me gustó la frase que se menciona en el texto "los silencios son tan importantes como las palabras, en las que el uso de una expresión castiza puede ser simpático o hundirme en el más espantoso de los ridículos", en la clase trato de estar pendiente de como se expresan, no me gusta que utilicen apodos o malas palabras, les hago saber que no es correcto, no me quedo callada cuando alguien trata mal a un compañero porque sería como estar de acuerdo. Me ha pasado también que cuando explico un tema algo les parece gracioso, a lo mejor porque alguna palabra la mencioné de forma incorrecta, pero aprendes a manejar la situación y les hago ver que aunque soy docente no soy perfecta, soy perfectible y que puedo aprender hasta de ellos como alumnos.
Se mencionan en el texto problemas a los cuales nos enfrentamos los docentes como la disciplina, a mi me ha funcionado el hecho de darle confianza al alumno en las clases, de mencionarles desde el primer día de clases las "reglas del juego", qué pueden o no hacer en la clase, además que les menciono cuáles van a ser los criterios de evaluación, les pregunto si están de acuerdo porque a lo mejor se puede negociar.
Ahora estoy muy contenta con mi labor docente, me gusta mucho y sí considero que es una aventura cada día porque nunca una clase va a ser igual a otra, ni de grupo a grupo aunque impartas la misma materia.
Creo que esos pequeños problemitas que se van presentando a lo largo del curso los podemos superar si nos preparamos bien, si somos realmente responsables de todo lo que hacemos en el aula, lo que decimos, el ejemplo que damos, con vocación de servicio.
Si me dieran la oportunidad de elegir nuevamente una carrera elegiría ser profesora de nuevo, no lo cambiaría por nada.
Saludos a todos
Clau

1 comentario:

  1. Hola Claudia!!!
    Gracias por la invitación, me gustó mucho tu blog y tus comentarios....disculpa la tardanza, pero no había abierto mi correo, como siempre estamos en el foro.
    Saludos, luego me indicas cómo subes imágenes a tu blog.
    Laura

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