
En mi caso me preparé para ser docente en la Facultad de Educación aquí en Mérida, Yucatán, me gradué como licenciada en educación en 1993, al terminar uno tiene muchos sueños como el de inmediatamente encontrar un trabajo en bachillerato o en el nivel superior como lo indicaba el perfil de mi licenciatura pero sorpresa está un poco difícil porque como menciona una compañera, los datos en el currículo eran escasos y no tenía la suficiente experiencia que pedían.
En fin el primer trabajo que tuve no fue como docente sino como asistente de una maestra que trabajaba en el edificio central de la Universidad de Yucatán, en el área de evaluación, toda una experiencia bonita que duró cerca de un año, pero se terminó el programa y a buscar trabajo nuevamente.
Llevé mis documentos a varias escuelas de bachillerato incluyendo de primaria, y cuál es mi sorpresa que me llaman de una primaria, trabajo que realicé 8 años, una experiencia hermosa que cambié por un trabajo en una licenciatura en ciencias de la educación que continúo haciendo.
Al mismo tiempo de estar trabajando en la primaria me llamaron del Colegio de educación profesional técnica del estado de Yucatán, Mérida II para impartir unas materias en el turno vespertino. Al principio por supuesto tenía muchos nervios porque me tocó un grupo de 40 alumnos todos varones por estar en electricidad, afortunadamente me fue bien y allí laboro hasta la fecha.
El ser profesor es una labor muy importante para mi, con mucha responsabilidad porque trabajamos con personas no con papeles o máquinas, además lo considero todo un reto porque los alumnos te están cuestionando y se fijan en todo, por eso hay que estar siempre preparados y actualizados.
El ser docente ha significado la oportunidad de crecer como persona y como profesionista, me ha dado grandes satisfacciones ejemplo cuando se te acercan los alumnos para compartir cuestiones personales, cuando te recuerdan por tu nombre aunque hayan pasado varios años y cuando lo que les enseñas realmente lo ponen en práctica y te dicen que sí les sirvió.
Cuando no me alcanza el tiempo para revisar tareas por el número de alumnos, no hay los recursos necesarios, cuando el alumno te comenta que a veces no tiene ni para el transporte y falta a las clases aunque es un buen alumno me crea una insatisfacción.
Claro son muchos más los momentos agradables y satisfactorios.
Por todo esto y más doy gracias por esta labor que desempeño.
Hasta luego.
Saludos
Hola Claudia
ResponderEliminarBuen trabajo, tienes mucha razón considero que la labor del docente es muy importante ya que como bien lo citas trabajamos con personas, y de una manera u otra los educamos, esperemos que con una enseñanza de calidad.
Saludos.